Monday, April 23, 2012

Salmo 121



Levanto mis ojos a los montes;
¿de dónde vendrá mi socorro?

Mi socorro viene del Señor,
que hizo los cielos y la tierra.
No permitirá que resbale tu pie,
ni se dormirá el que te guarda.
 He aquí, el que guarda a Israel
no se adormecerá ni dormirá.
 El Señor es tu guardián,
el Señor es tu sombra a tu diestra.
 El sol no te hará daño de día,
ni la luna de noche.
 El Señor te guardará de todo mal;
él guardará tu vida.
 El Señor guardará tu salida y tu entrada,
desde ahora y para siempre.